30/9/11

Mis problemas del día a día se desvanecerán gradualmente (2)

Fórmula: He de ver como en todo lo que hago me estoy aferrando a una persona o yo inherentemente existente. Si estoy trabajando en el Instituto, por ejemplo, no pienso 'Mi cuerpo está en el Instituto', ni 'Mi mente está en el Instituto'; sólo pienso 'Yo estoy en el Instituto' y concibo un yo que es independiente de mi cuerpo, de mi mente y de cualquier otro fenómeno. Esta persona o yo es el objeto concebido de la visión innata de la colección transitoria, y no existe en absoluto.

Puedo aplicar esta misma fórmula, mutatis mutandis, en muchas situaciones del día a día, y adiestrarme contínuamente así en identificar en mi propia experiencia el yo inherentemente existente que es el objeto de negación de la vacuidad de las personas. Por ejemplo, el ejemplo que se da en OON es que cuando voy de compras no pienso 'Mi cuerpo quiere esto', ni 'Mi mente quiere esto', sino que sólo pienso 'Yo quiero esto', y aprehendo un yo que es independiente de mi cuerpo y de mi mente, etc. Pregunta: ¿Cómo puedo decir que el yo que veo vívidamente, directamente, no existe? Respuesta: Porque cuando lo busco con sabiduría no lo puedo encontrar, es inencontrable. Ésta es la razón válida por la que puedo decir que el yo que normalmente veo no existe.

27/9/11

Mis problemas del día a día se desvanecerán -- gradualmente

Líneas de pensamiento basadas en OON, donde se lee que yo, persona y ser son sinónimos, y que su falta de existencia inherente es la vacuidad de las personas. Analizo detenidamente muchas veces como sigue: Normalmente me aferro muy fuertemente a mi propio yo o persona. Esta ignorancia del aferramiento propio destruye mi paz mental y me hace desarrollar apego, odio y demás engaños. Si acostumbro mi mente a este conocimiento perfecto, que un yo inherentemente existente no existe, entonces gradualmente --por la pacificación gradual de la ignorancia y los engaños-- mis problemas del día a día se desvanecerán, y yo experimentaré felicidad pura. Finalmente alcanzaré la paz interior permanente de la liberación o la iluminación.

En resumen: He de acostumbrar mi mente al conocimiento perfecto de que el yo que concibo en todo lo que hago, pienso y digo, no existe. Con esto gradualmente mis problemas del día a día se desvanecerán, y experimentaré felicidad pura.

Dice que con el estudio cuidadoso de las instrucciones del Dharma sobre sabiduría se consigue el conocimiento perfecto de que el yo inherentemente existente no existe. He de tener en cuenta el sentido de la concordancia que hay entre el 'finalmente' de la última línea con 'gradualmente' de la línea anterior, y de éste con 'acostumbrar' o familiarizar la mente de antes; y el sentido del Lamrim como camino gradual o camino graduado a la iluminación.
--- ---
Pregunta: Si el yo inherentemente existente no existe, ¿cuál es el yo que experimenta felicidad?

24/9/11

Ejercitarse no es conseguir

Pregunta: He entendido que para identificar a la persona o yo inherentemente existente --el objeto de negación de la vacuidad de las personas--, he de ejercitarme en observar cómo en todo lo que hago concibo un yo que es independiente del cuerpo y de la mente. El problema es que a mí no me parece ver al yo como independiente de mis agregados de cuerpo y mente, sino estrechamente relacionado con ellos.

Respuesta: El yo inherentemente existente aparece relacionado con los agregados, pero no en una relación de dependencia sino en una relación de poseedor y objeto poseído. No parece que el yo que normalmente percibo en todo lo que hago dependa del cuerpo y de la mente para su existencia. Lograr ver al yo [que aparece como] independiente es la cosa a conseguir, y ejercitarse es ejercitarse en conseguirla. En OON se lee: Hemos de observar nuestra mente estrechamente durante un largo período antes de poder identificar claramente cómo este yo inherentemente existente aparece a nuestra mente (...) Ese tiempo, no obstante, está bien empleado porque sin identificar el yo inherentemente existente en nuestra propia experiencia, no seremos capaces de realizar su no existencia, la vacuidad de las personas; y sin realizar la vacuidad de las personas no podremos alcanzar liberación del samsara.

18/9/11

Qué pensar de las mujeres y los hombres (2)

Pregunta: Entonces, por la misma razón por la que no es apropiado criticar a las mujeres en general, i. e. porque entre las mujeres hay muchas emanaciones de Buddha Vajrayogini, ¿no es apropiado y meritorio ver a las mujeres en general como verdaderas fuentes de verdadera felicidad, puesto que entre las mujeres hay muchas emanaciones de Vajrayogini?

Respuesta: Si pienso que las mujeres son personas ordinarias, mujeres ordinarias, verlas como verdaderas fuentes de felicidad es equivocado. Pero si pienso sinceramente que pueden ser emanaciones de Vajrayogini, es correcto ver a las mujeres en general como verdaderas fuentes de verdadera felicidad. En TYL dice que desde el punto de vista del efecto que produce en la mente, pensar que alguien puede ser un Buddha es casi lo mismo que pensar que es un Buddha. Esto está en el apartado sobre desarrollar humildad, pues la única persona de la que podemos estar absolutamente seguros de que no es un Buddha somos nosotros mismos.

15/9/11

Qué pensar de las mujeres y los hombres (1)

Si se acepta la tesis (no comúnmente aceptada) de que las mujeres sienten tanto deseo por los hombres como ellos por ellas, es decir, el mismo deseo -- con la única diferencia de que los hombres no saben ni piensan siquiera en ocultarlo--, se puede considerar que las mujeres en general no están siendo generosas al exigir implícitamente casi siempre algo a cambio de la satisfacción del deseo, ya sea compromiso, regalos, tiempo etc.

Pero un practicante no debería pensar así, pues el Dharma enseña que entre las mujeres hay muchas emanaciones de Buddha Vajrayogini, y que criticando a las mujeres en general se critica a estas emanaciones. Menospreciar a las mujeres es una caída raíz de los compromisos del Mantra Secreto. Dice: Si un practicante masculino critica a las mujeres, diciendo 'Las mujeres son malas', incurre en una caída raíz. Entre las mujeres hay muchas emanaciones de Vajrayogini, y criticando a las mujeres en general estamos criticando a estas emanaciones y con ello bloqueando nuestro desarrollo del gozo. Las practicantes femeninas incurren en una caída similar si critican a los hombres.

12/9/11

Contando postraciones

Durante el pasado mes de Agosto se contaron 1.125 postraciones completas. Así, acumuladas en total -en segunda cuenta- 1.125 + 36.140 = 37.265. Además, aparte de la práctica formal regular, durante ese mes me propuse algunas prácticas incidentales [*], entre ellas presentar una versión definitiva de mi traducción casera para uso personal de la sadhana Esencia de Vajrayana Condensada [*].

9/9/11

La sola cosa a buscar

Muchas veces en estos escritos digo 'yo', 'yo', 'yo', pero es claro que cualquier otra improbable persona que los lea es también --para ella misma-- 'yo', 'yo', 'yo'. Por lo que todo lo que aquí se dice, que tenga que ver con el Dharma, es válido en general y no sólo para mi. No he de creer que soy 'yo' la única persona que experimenta insatisfacción, por ejemplo. Es al contrario, el Dharma enseña que en el samsara, nuestra vida contaminada, nadie quiere experimentar insatisfacción, pero todos la experimentan sin elección (el subrayado es mío). Así es que, continuando como antes:

Por la fuerza de la costumbre puedo seguir pensando que me faltan toda clase de otras cosas --desde encontrar amigos fieles a volver a estudiar latín-- para alejar la insatisfacción y tener felicidad; pero, habiendo recibido enseñanzas, ahora sé que si no tengo felicidad es sólo porque no tengo paz mental. Meditar primero en esto. O bien, en resumen, meditar así: No he de seguir pensando que me faltan toda clase de otras cosas para alejar la insatisfacción y tener felicidad. Para tener felicidad real, la sola cosa que me falta y la sola cosa a buscar es paz interior, o paz mental.

En MB se lee: Cuando sus mentes [las de los seres vivos, incluídos animales] tiene paz y están en calma, son realmente felices. Pero si sus mentes no tiene paz, no son felices aunque sus condiciones externa sean perfectas. Esto prueba que la felicidad depende de la paz mental.

6/9/11

Un conocimiento impagable

Por una parte, por la fuerza de la costumbre, todavía sigo pensando que me faltan toda clase de otras cosas para tener felicidad o para ahuyentar el descontento. Por otra parte, debido a que he recibido enseñanzas, ahora sé que la sola razón de no tener felicidad es no tener paz mental. Por tanto:

No debería seguir pensando, como hasta ahora, que me faltan toda clase de otras cosas para tener felicidad o para ahuyentar el descontento; porque ahora sé que si no tengo felicidad es sólo porque no tengo paz mental, simplemente.

Hay quienes creen que paz mental debe ser algo aburrido, pero esto es claramente equivocado porque si tienes aburrimiento, no tienes paz mental; si tienes aburrimiento, tienes sufrimiento, que es lo contrario de paz mental. Se dice que en tiempos espiritualmente menos degenerados, cuando lo esencial importaba, conocimientos como el que sigue, extraído de la sala de los tesoros del Dharma, se consideraban sumamente valiosos y prácticamente impagables:
Ya que la felicidad es un estado mental, se sigue que su causa principal debe estar en la mente, y no en los objetos externos. La causa principal de felicidad es paz interior, o paz mental.

3/9/11

Sin fe, todo es ordinario (y 4)

La religión, por su naturaleza misma, siempre apunta a algo mejor que lo meramente humano, incluso a algo infinitamente mejor. Por esta sola razón es muy apropiado estar a favor de quienes están a su favor y defender a quienes la defienden. Por muchos defectos y fallos que las personas religiosas puedan tener, ¿cómo sostener que tienen más que los demás humanos y que los demás son, por tanto, mejores que ellas?

En sí mismas las personas religiosas no son peores ni mejores que las demás, son iguales. Pero este único punto en particular las hace, a mi parecer, preferibles: que se orientan a algo mejor para la humanidad que lo que es meramente humano. Si se deja aparte la auto-propaganda, lo sólamente humano es casi igual que animal, no es tan diferente, no es mucho mejor; y si se consideran perversiones típicas de los humanos, como guerras y demás, es peor que animal. Como le dijo el gran yogi Milarepa a un cazador: Tú, que tienes una mente de animal en un cuerpo humano, / Por favor, escucha mi canción. Y en Budismo Moderno, Geshe Kelsang dice: Aunque físicamente no somos una tortuga, mentalmente no somos muy diferentes.

Por tanto, en resumen, he de analizar detenidamente lo que se dice en Transforma tu Vida, que: Sin fe, todo es mundano. Somos ciegos para todo lo que está más allá del mundo ordinario, imperfecto, que normalmente habitamos, y no podemos ni siquiera imaginar que existan seres, mundos y estados mentales puros y sin falta. La fe es como ojos puros que nos permiten ver un mundo puro y perfecto más allá del mundo sufriente del samsara.